El Síndrome del Edificio Enfermo (SEE) es un concepto que habitualmente se utiliza para describir situaciones en las que los ocupantes de un edificio experimentan problemas de salud y/o molestias que parecen estar relacionadas con el tiempo que pasan en dicho espacio y cuya principal causa suele ser la gran cantidad de contaminantes de diversa procedencia que inciden directamente en una mala calidad del aire interior, y en consecuencia en la salubridad de los ocupantes del edificio.

CARACTERÍSTICAS COMUNES

Tradicionalmente siempre se ha relacionado el término o concepto del “edificio enfermo” con construcciones antiguas cuando, por el contrario, el mayor número de edificios identificados bajo esta denominación se corresponden con construcciones modernas y herméticas coincidentes en una serie de deficiencias identificadas por la propia OMS.


  • Edificios con sistemas de climatización y/o ventilación ineficientes o mal diseñados.
  • Edificios de construcción ligera.
  • Edificios cuyas superficies están recubiertas de algún material textil en paredes, suelos con
  • moquetas o amplias alfombras que atraen el polvo y las bacterias y otros elementos de
  • diseño interior.
  • Edificios que practican el ahorro energético y se mantienen relativamente calientes con un
  • ambiente térmico homogéneo.
  • Edificios considerados herméticos en los que las ventanas no pueden abrirse generándose
  • un ambiente de aire viciado.

SOLUCIONES

  • Instalación de sistemas de ventilación mecánica controlada que contribuyan a la generación de un
  • aire interior limpio.
  • Mantener una temperatura y humedad relativa ajustadas a los valores recomendados y razonables
  • para una óptima calidad del aire y confort térmico del espacio interior.
  • Realizar periódicamente las labores de mantenimiento y limpieza de los equipos de climatización y
  • ventilación para garantizar su eficacia.
  • Utilizar una iluminación adecuada evitando exceso de brillo o reflejos causantes de diversos
  • trastornos en la visión. Controlar los niveles de ruido y presión sonora para mantenerlos en los límites
  • aconsejables, es decir, en 60-70 dB(A) ya que valores superiores pueden ser origen de estrés o fatiga.
  • Limpiar regularmente alfombras, moquetas y otras superficies susceptibles de acumular
  • contaminantes efectuando estas labores en horarios de no ocupación del edificio siempre que sea
  • posible aplicando los productos siguiendo las recomendaciones en cuanto a cantidades, diluciones, etc.
Abrir chat